Vector X – Luis Antonio Vidal @vidal_38


Por todos lados suena la salida de Enrique Ochoa como presidente nacional de ese partido. Hace dos días, el siempre bien informado columnista de El Universal, Salvador García Soto, dio por hecho su renuncia, y la llegada del secretario de Organización, Rubén Moreira.
El mismo sábado por la tarde, Ochoa se apresuró a responder que no se va del partido, y se quedará a terminar la campaña, como si la decisión de permanecer estuviera en sus manos.
Sumido en el tercer lugar de las encuestas, al candidato presidencial del PRI, José Antonio Meade, le urge el cambio de coach por un militante con experiencia en las lides electorales. Y quizá ni así levante.
Ocurre igual en Tabasco. Gustavo de la Torre, presidente estatal del PRI, sufrió el desgaste natural del proceso interno para la postulación de candidatos. Sólo le falta integrar la lista de plurinominales locales.
De la Torre es dirigente por circunstancia. Llegó al CDE en abril del año pasado para acomodar la casa y almidonar los manteles para la unción de Gina Trujillo como candidata al gobierno.
Cumplió su tarea, y deberá marcharse para dar paso a un dirigente que contagie liderazgo, un priísta combativo, porque él no transmite emociones, no prende con la militancia, no convence a nadie.
Si el PRI aspira a ser competitivo en las elecciones, la candidatura de Gina debe apoyarse en una dirigencia con carácter, en un político hecho.
El cambio no garantiza al partido salir del tercer lugar de las preferencias ciudadanas, pero algo deben hacer en el bunker priísta antes que inicie la campaña.
LA MORRALLA
También en la cuadra tricolor se disputan con intensidad las candidaturas locales por la vía plurinominal. Anotados Pedro Gutiérrez, Félix Sarracino, Gerald Herrera, Nelly Osorio, Katia Ornelas y hasta Lorena Beaurregard, siempre buscando hueso *** Encuestas de chile, dulce y manteca circulan por todos lados. Son un platillo a la carta *** Hasta el jueves.

Leer en Tabasco Hoy Voces

Deja una respuesta